En Quito se realizan diariamente 22 millones de viajes en transporte público masivo. Foto: Galo Paguay/ El Comercio.
El desarrollo de los nuevos proyectos de movilidad: metro cable, la prolongación del trolebús y ecovía, el metro o el tren ligero… podría verse limitado si el Municipio llega a pagar un subsidio a los transportistas.Una nueva tarifa del transporte público, cuya revisión empieza esta semana, demandaría nuevos recursos si se opta por el subsidio.
Para explicar la magnitud del problema, cabe señalar que los transportistas en Quito reciben, solo por compensación para cubrir la diferencia del medio pasaje (USD 0,12) que pagan los niños, estudiantes, adultos mayores y personas con discapacidad, un total de USD 875 000 mensuales. Ese subsidio, vigente desde diciembre del 2011, entrega hoy el Gobierno a los dueños de 2 500 unidades en la capital.
Este valor sería mucho más alto, tomando en cuenta que los transportistas piden una revisión integral de las tarifas y no solo la de USD 0,12. Han sugerido que el costo del pasaje suba a USD 0,38 o USD 0,42.
José Santamaría, presidente de la Cámara de Transporte del Distrito, informó que una vez que se determine el nuevo pasaje habrá que hacer los ajustes y determinar quién cubrirá estos montos: la ciudadanía, el Municipio o el Gobierno.
En Quito de los 2,2 millones de viajes que se hacen a diario en transporte público masivo, el 21% corresponde a la media tarifa. Los USD 875 000 valor que por ahora demanda la compensación cada mes, por la media tarifa, representa el precio estimado de un trolebús nuevo.
Pese a ello, el dirigente dice que estos recursos no cubren los gastos del transporte. En promedio, cada unidad recaudan USD 5 000 al mes, más USD 350 por la compensación. Ese valor -explica- sería igual a los egresos mensuales que tiene cada unidad. “El transporte privado sigue subsidiando a los usuarios de la media tarifa”, afirma.
Mario Villagómez, docente de la maestría en Transporte de la U. Católica, mencionó que el Cabildo debe buscar los mecanismos para recabar estos recursos y asumir estas nuevas responsabilidades. “De ser necesario, podría sacrificar algún proyecto planteado”.
Obras como el metro cable, la prolongación del trole y ecovía, tren ligero y metro tienen costos que van desde USD 200 millones hasta 2 934 millones.
El docente señaló que lo importante, en este debate por las tarifas, es mejorar la movilidad y la calidad del transporte.
Para Antonio Ricaurte, concejal de SUMA-Vive, estos subsidios deberían ser asumidos por el Cabildo, porque esto no afectaría a la ejecución del metro cable, el tren ligero y prolongación del trole.
Para ello se podría recurrir a aportes del Gobierno central, organismos financieros… Pero, el jefe del bloque SUMA-Vive, Sergio Garnica, insisitió en que los subsidios deben ser transferidos por el Gobierno, porque constan en el presupuesto general del Estado. El presupuesto del Cabildo es de USD 950 millones, que no incluye subsidios para el transporte público.