Los bomberos de Esmeraldas deben atender -en promedio- un incendio semanal. Los percances se producen, generalmente, en las viviendas. Foto: Marcel Bonilla / EL COMERCIO
Marcel Bonilla. Redactor
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La provincia de Esmeraldas tiene 13 cuerpos de bomberos, pero les falta casi todo: personal, autobombas, escaleras hidromáticas, equipos de rescate, vestimenta adecuada, autotanques y otros implementos.
Un diagnóstico del ECU-911 de Esmeraldas hecho en abril de 2013 determinó que las 13 entidades, distribuidas en los siete cantones de la provincia, no estaban bien equipados. No tenían ambulancias y las autobombas no funcionaban al 100%, lo cual se mantiene.
Por este hecho, el Cuerpo de Bomberos de Esmeraldas pide que los municipios manejen esas entidades, como estableció el Consejo Nacional de Competencias.
Los 13 organismos tienen 144 integrantes. Según la norma internacional, por cada 1 000 habitantes se necesita un bombero y visto así, la provincia debería tener cerca de 550. Solo la ciudad de Esmeraldas tiene 50, cuando deberían ser 200.
Miguel Alarcón, especialista en seguridad industrial, señala que Esmeradas es considerada como una bomba de tiempo. Tiene 15 estaciones de servicio en la ciudad, una Refinería y una planta termoeléctrica. Eso la vuelve vulnerable. Por eso cree que se debe repotenciar el Cuerpo de Bomberos de la ciudad y el resto de cantones.
En 16 años, tras el incendio el 26 de febrero de 1998, por un derrame de petróleo, la situación de los bomberos no cambió. En ese entonces, el fuego quemó casas y cultivos de las familias de la orilla del río Esmeraldas. También hubo fallecidos.
El 21 de octubre del 2013 el fuego consumió media cuadra del centro bancario de la ciudad. Los bomberos no tuvieron las herramientas ni los implementos para controlar el incendio. En esas condiciones se enfrentan a los siniestros que se presentan -en promedio- uno por semana.
El jefe de los bomberos de la capital provincial, José Vivero, dice que se necesitan USD 5 millones para comprar nuevas unidades. Con los USD 102 000 que recibe al mes paga sueldos de los 50 bomberos (entre USD 560 y 1 300), seguro de vida y accidentes, compra de materiales y equipos, y capacitación.
El bombero Segundo Girón dice que tienen material contra incendios, pero no equipos de rescate, autotanques y autobombas. “Las nueve autobombas que hay en la provincia ya han cumplido su ciclo. Eso limita el trabajo y pone en mayor riesgo la vida de los bomberos”. Cada uno de los 13 cuerpos necesita una autobomba.
Otro diagnóstico del Cuerpo de Bomberos de Esmeraldas estableció que en Rioverde y Muisne, las dos autobombas están dañadas. En San Lorenzo, Quinindé, Eloy Alfaro y Atacames, su funcionamiento es irregular. Aunque Verónica Nieves, jefa del Cuerpo de Bomberos de Quinindé, indica que en los últimos cinco años se mejoró la dotación de materiales contra incendio y uniformes adecuados.
La situación es más crítica en San Lorenzo, que apenas recauda USD 11 750. Solo alcanza para pagar sueldos, y comprar materiales y uniformes.
Según el Consejo Nacional de Competencias, las primeras transferencias se podrían realizar a fines del próximo año.
Sin embargo, el tema solo ha sido debatido en Esmeraldas.
El alcalde Lenin Lara manifiesta que esta nueva responsabilidad será tratada en el Concejo. Vivero cree este es un gran paso, pero debe respetarse la autonomía. La institución tiene 84 años de creación. En los últimos seis años ha recibido materiales contraincendios del OCP y Petroecuador.