La mañana de este 22 de noviembre, la Panamericana Norte, por donde los fieles caminaron hasta El Quinche, no presentó mayor congestión.
A las 10:00, la vía tenía poca circulación vehicular. Desde Carapungo hasta el puente de Guayllabamba se pudo observar a unas 30 personas que aún participaban en la peregrinación.
En la vía, a la altura de la Simón Bolívar, la asistencia masiva de la gente la noche anterior y madrugada dejó su huella: platos desechables en el suelo, vasos, fundas de alimentos… pero una parte de la vía ya había sido limpiada.
De Quito a El Quinche, antes del puente de Guayllabamba, unas 20 carpas que se levantaron para vender alimentos, estaban vacías. Algunas ya desarmadas.
El tramo donde más feligreses se observó fue pasando Guayllabamba, en el sector conocido como la fábrica de galletas. Unas 200 personas caminaban por el filo de la vía (no hay veredas) por una cuesta un poco pronunciada. Algunas ayudándose de bastones, cargando maletas, llevando niños…
En ese tramo, cada 100 metros aproximadamente, se encontraban fundas que contenían los desperdicios que personal de limpieza había recogido.
Solo en esta zona se levantaron unos 20 puestos de comida.
La caminata empezó la noche del 21 de noviembre y terminará la tarde del 23. El trayecto se lo recorre especialmente en la noche. Se espera que hoy, a partir de las 18:00 nuevamente otro grupo significativo de fieles salga desde Calderón para caminar hasta El Quinche.