Cuba liberó a Alan Gross a pedido de Estados Unidos

Organizaciones humanitarias apoyaron y promovieron la liberación de Alan Gross en Cuba. Foto: AFP

Organizaciones humanitarias apoyaron y promovieron la liberación de Alan Gross en Cuba. Foto: AFP

Organizaciones humanitarias apoyaron y promovieron la liberación de Alan Gross en Cuba. Foto: AFP

Las autoridades cubanas liberaron este martes, 17 de noviembre, al prisionero estadounidense Alan Gross ante un pedido de carácter humanitario formulado por Estados Unidos, afirmó un funcionario de la Casa Blanca, en Washington.

"Esta mañana, Alan Gross abandonó Cuba en un avión del gobierno en dirección a Estados Unidos. El señor Gross fue liberado por motivos humanitarios por el gobierno cubano, a pedido de Estados Unidos", señala el comunicado oficial.

Gross, de 65 años y que pasó cinco en prisión, fue condenado en 2011 a 15 años de cárcel por delitos contra "la integridad del Estado". El gobierno cubano lo acusó de introducir al país sofisticados aparatos de telecomunicaciones prohibidos por la legislación cubana.

Gross, de origen judío y que trabajaba para la agencia de desarrollo estadounidense USAID, asegura que los equipos estaban destinados a dar acceso a Internet a la pequeña comunidad judía en la isla.

El encarcelamiento del contratista en Cuba era uno de los grandes obstáculos que ha impedido en los últimos un posible acercamiento entre los dos países. Mientras el gobierno de La Habana ofrecía desde hace años un intercambio por varios espías encarcelados de la isla en Estados Unidos, Washington se negaba a vincular ambos casos.

La desesperación del encarcelado Gross, en tanto, iba en aumento. El contratista amenazó indirectamente con suicidarse en junio, poco después de que su madre muriera de cáncer y de que Cuba no le concediera permiso para ir a visitarla. "Me temo que estamos al final.

Después de cinco años consumiéndose literalmente, Alan está acabado", dijo su esposa, Judy Gross, al cumplirse el 2 de diciembre los cinco años de su encarcelamiento.

Según la familia, la salud de Gross se ha deteriorado considerablemente debido a las circunstancias de su confinamiento y a los efectos de una depresión.

El caso mantenía la distancia entre ambos países en un momento en el que se han multiplicado las voces que reclaman el fin del embargo que Estados Unidos impone a la isla desde hace más de 50 años.

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