‘Drone Boning’ es un proyecto audiovisual, filmado con drones, que vuelve sofisticado el género erótico. Foto: Ghost+Cow Films
La escena muestra una playa con grandes rocas y un espumoso mar, todo visto desde arriba. Podría ser una toma común y corriente, de no ser por un par de cuerpos entrelazados- y diminutos- que reposan sobre la arena.
El peculiar y adecuadamente compuesto plano forma parte de ‘Drone Boning’, un proyecto cinematográfico poco explorado que varios medios han catalogado como la primera, o una de las primeras cintas eróticas (o quizás porno) filmadas utilizando drones.
El tráiler de la cinta que, según un artículo de El País de España, podría ser precursora de un nuevo subgénero fílmico fue compartido por la productora a cargo Ghost+Cow Films, a cargo de Brandon LaGanke y John Calucci.
En ‘Drone Boning’ la estética se superpone a la recreación del acto sexual, de manera que en el video de muestra del proyecto se observa una bien trabajada secuencia y yuxtaposición de naturaleza y sexo. El movimiento se da a través de alejamientos y acercamientos, sin llegar al primer plano, sin usar el rotundo close-up.
Así, con la ayuda de la tecnología parecería estar surgiendo una nueva corriente de tratamiento de ‘lo porno’ en las plataformas audiovisuales, caracterizada por la sofisticación.
‘Drone Boning’, casi única en su tipo, salvo porque existe una producción titulada ‘Creepy Drone Guy’ que también fue rodada por vehículos aéreos no tripulados, combina majestuosos países con breves tomas de sexo explícitas, pero no al punto de lo que se acostumbra a ver en los materiales de cine porno ‘tradicionales’.
Por otra parte, Aurora Snow, una actriz y escritora que colabora en The Daily Best describe en un artículo para este medio a ‘Drone Boning’ como un “documental de la BBC sobre seres humanos fornicando en ambientes salvajes” y concluye que lo creado por LaGanke y Carluccio “hace ver al sexo como arte”.
LaGanke contó- en una entrevista para la revista Filmmaker– que la iniciativa surgió cuando “estaba trabajando con unos drones, filmando un plano perpendicular desde el cielo”, entonces pensó que sería divertido que “en cada uno de los planos que estaba haciendo hubiera una pareja dándole al tema. Como ¿Dónde está Wally? Pero con sexo”.
En la misma publicación las mentes detrás de la producción mencionaron que fue filmado enteramente en los alrededores de San Francisco. El productor Chad Ghiron conocía todas las locaciones, las mismas que tenían que ser extremadamente bellas y épicas para vender el concepto.
Este material audiovisual que ha causado revuelo en Internet y redes sociales tendrá su inauguración ‘oficial’ en el New York City Drone Festival.
Mire el video de ‘Drone Boning’ aquí