El sobrepeso afecta a uno de cada dos adultos en América Latina. Esta enfermedad ha cobrado la vida de 5 millones de personas en la región. Foto: Archivo/ EL COMERCIO
La obesidad y el sobrepeso en América Latina han crecido en los últimos años. Según La Organización Panamericana de la Salud (OPS), estas enfermedades, que hoy son una epidemia, han cobrado la vida de 5 millones de personas en Latinoamérica.
Según la representante de OPS en Ecuador, Gina Tambini, “la obesidad, el sobrepeso afecta al menos uno de cada dos adultos y ya hay algunos países donde es tres de cada cuatro”.
Además, los niños son ahora las principales víctimas. En Ecuador, 3 de cada 10 niños en edad escolar tienen sobrepeso. Por ello, se han iniciado algunos proyectos para evitar que los pequeños se alimenten erróneamente, entre ellos, los controles en los bares escolares y la inclusión del etiquetado de los productos.
Pero estas limitaciones y controles deben ir acompañados de una dieta rica en nutrientes. Por ello, es fundamental, según Manuel Peña, consultor de la Organización Mundial de la Salud (OMS), que se envíe, por ejemplo, en las loncheras colegiales, comida tradicional, como los chochos, el choclo y el tostado.
Aunque por el ritmo de vida tan vertiginoso, en el cual las madres tienen poco tiempo para cocinar en las mañana, Peña dice que una buena opción son los sánduches de jamón y queso. Pero estos deben ser hechos en pan integral y no para consumo diario, porque los embutidos tienen un alto contenido de sal.
Una alternativa es la ensalada de huevo con tomate, lechuga y zanahoria.
Además, el experto recomienda que los niños coman las frutas en su estado natural, es decir sin hacerlas jugo o almíbar, porque la vitamina C se pierde a los 48 grados centígrados.
Además, este ‘lunch’ debe estar acompañado de un almuerzo variado, en donde se incluyan leguminosas, productos cárnicos, verduras y mucha fibra, que se encuentra en varios cereales, como la avena.
La alimentación sana incluye, según la OPS, la eliminación de los productos procesados, la eliminación del consumo de las grasas trans y de las grasas saturadas.
Estos son productos baratos y de fácil acceso, por lo que han influido en los hábitos alimenticios de los ecuatorianos, que en 28 años ha provocado el incremento de la obesidad en un 104%.