Ozzy Dread profesa el respeto a la vida en todas sus formas. No pertenece a la ideología Rasta. Foto: Julio Estrella/ EL COMERCIO
La forma de llevar el cabello ha sido a lo largo de la historia un distintivo de diferentes civilizaciones. Además de su función en el organismo, el cabello ha servido para exteriorizar la forma de pensar y las creencias filosóficas o religiosas de las personas. Y una muestra feaciente de esta práctica son los ‘dreadlocks’, conocidos popularmente como rastas.
Se trata de tubos de cabello enredados herméticamente, que se pueden lograr de diversas formas. Quienes las llevan, les otorgan un significado íntimo, personal, acorde a su postura y forma de afrontar la vida.
Ese es el caso de Andrés Herrera, estudiante de Comunicación Social que tiene ‘dreads’ desde hace aproximadamente tres años. Su acercamiento a este estilo fue gracias a la influencia del reggae y la ideología Rastafari.
Como una forma de autogestión y desprendimiento, Herrera “tejió” sus propios tubos, que simbolizan un desapego de la vanidad estética. También las usa a manera de tributo a la cultura africana. ‘Andreds’, como lo conocen en su círculo íntimo, asegura que al llevar el cabello de esa forma se envía un mensaje de liberación de la opresión.
Esa postura también la tiene Agustín Lara, quien incluso citó versículos de la Biblia que influencian directamente al rastafarismo. En esos escritos, se hace referencia a que los seguidores de Jah (Dios) no se deberán cortar el pelo ni la barba.
Conexió. La frase ‘yo y yo’ se refiere a la conexión personal que, según los rastas, da cuenta que Dios está siempre presente en el mundo. Simboliza el vínculo con el creador. Foto: Pavel Calahorrano/ EL COMERCIO
Ambos ven a la sociedad “capitalista y consumista” como una materialización de Babilonia. Para ellos, ser rasta es una liberación espiritual que forma parte de todo un ritual .
“Cuando un hermano se sienta libre o de regreso a la montaña de Zion, ahí será cuando se pueda despojar de las motas”.
Pero contrariamente de lo que se cree, no necesariamente se debe compartir la ideología Rastafari para llevar ‘dreadlocks’. Así lo sostiene Ozzy Dread, quien empezó a llevar el cabello de esa forma durante un viaje a Argentina. Ozzy, bautizado así por un maestro (no usa su registro de la cédula desde hace 25 años), considera que el nombre no es lo importante, sino cómo es la persona. “Me siento mejor así ”, dijo.
Sus bien logradas rastas, que le llegan hasta la parte baja de la espalda, irrumpen con la cotidianidad del norte de Quito.
Mientras pasea en su bicicleta, Ozzy da cuenta que los ‘dreadlocks’ son un símbolo de rebeldía y a la vez de libertad.
Aunque aseguró que erróneamente se los suele asociar únicamente con los seguidores del reggae. “No porque lleves rastas necesariamente tienes que seguir esa creencia”.
Su fundamento es que los ‘dreads’ ya fueron utilizados por civilizaciones hace miles de años. En la India, por ejemplo, están los personajes llamados Sadhus, que siguen el camino de la penitencia y austeridad para obtener la iluminación.
Oración. El agradecimiento por las bendiciones recibidas se cumple a través de la oración. La posición de las manos también exterioriza la meditación, para alcanzar la iluminación. Foto: Pavel Calahorrano/ EL COMERCIO
Ellos cubren su cuerpo con ceniza y llevan el cabello en forma de bucles o rastas, a las que denominan Jata. Muchos Sadhus imitan la vida mitológica del dios Shiva, renunciando a todos los vínculos que los unen a lo terrenal o material en la búsqueda de los verdaderos valores de la vida.
En el caso de Ozzy, su principal postura es la del respeto a la vida en el planeta, en todas sus formas posibles. Para lograrlo, trata de contaminar lo menos posible, usa sistemas alternativos de movilización y practica la agricultura urbana. Esto a pesar de que no profesa y no forma parte de ninguna religión.
Como una forma de respeto a los recursos naturales de la Tierra, Ozzy dijo que no desea dejar descendencia. En su tiempo libre, él teje ‘dreads’ a las personas que lo desean utilizando la técnica del crochet. Esa, aseguró, es la mejor forma de obtener unas rastas uniformes.
Sin embargo, Ozzy ha notado que aún se asocia un estereotipo negativo a las personas que llevan ‘dreadlocks’. “La gente a veces nos ve mal porque adoptamos una imagen distinta a los convencionalismos ”, dijo.
En el ámbito musical, artistas contestatarios como Jonathan Davis, de Korn; o Zach de La Rocha, vocalista de la desaparecida banda Rage Against The Machine, también abanderaron los ‘dreads’ y les dieron un significado rebelde.
Así, entre batallas espirituales internas y objetivos de vida distintos, las personas que usan ‘dreadlocks’ cuestionan a la sociedad y envían, a su modo, un mensaje de resistencia.