En la sucursal, ubicada en el centro de Guayaquil, solicitaban información sobre sus depósitos. Foto: Mario Faustos / EL COMERCIO
Un cartel que anunciaba la liquidación del Banco Sudamericano sorprendió ayer a los clientes de esta entidad, que en julio pasado cumplió 36 años.
A las 08:30, la oficina matriz de la entidad, en Quito, abrió con normalidad sus puertas, pero minutos después un grupo de 10 policías se colocó en la entrada e impidió el ingreso de los clientes que llegaron.
Cerca de las 10:00 funcionarios de la Superintendencia de Bancos y Seguros (SBS) ocuparon las instalaciones, luego de colocar un aviso donde se leía que el banco había entrado en liquidación por “problemas de solvencia e incumplimientos reiterativos a la normativa y leyes vigentes”.
La solvencia de un banco mide la suficiencia de capital y patrimonio técnico.
Varios clientes, que se acercaron ayer a las agencias de Quito, Guayaquil, Manta y Santo Domingo, a retirar dinero o cobrar cheques, lucían desconcertados por la decisión.
Vinicio Arroyo, quien tiene una empresa de exportaciones e importaciones, acudió a la matriz en Quito para retirar USD 25 000 que un cliente de EEUU le había transferido.
“Ese dinero lo necesito para pagar impuestos aduaneros y sacar la mercadería. Cómo vamos a responder a los proveedores a quienes debo entregar los productos”, dijo el cliente que tiene una cuenta en la entidad desde hace cinco años.
La ultima calificación positiva del Sudamericano, según consta en la página electrónica de la SBS, fue en diciembre del 2010, cuando se ubicó en BB+. Pero a diciembre del 2011, esta pasó a BB, nota que se mantuvo el 2012. El indicador siguió en descenso y en septiembre del 2013 se ubicó en BB-.
El informe de calificación de riesgo de diciembre de ese año no está disponible en la página electrónica de la SBS. Pero el documento consta en la página web de la calificadora de riesgos Class International Rating que evaluó al banco.
En un informe del 7 de febrero pasado, la calificadora bajó aún más la nota del Sudamericano de BB- a D- para diciembre del 2013, lo cual fue ratificado en mayo por el Comité de Calificación de Class International Rating.
No obstante, la SBS anotó que la calificación de riesgo de ese período está “pendiente, debido a que se encuentra en un segundo proceso de calificación”.
El informe de Class International Rating se realizó con información con corte al 31 de diciembre del 2013.
La calificadora observó algunos problemas en la entidad. Uno de ellos fue que la entidad no estaría cumpliendo con lo estipulado en el Manual de Políticas y Procedimientos de Crédito.
“En especial en lo que respecta a la documentación necesaria para el análisis y otorgamiento del crédito, a una carencia de las respectivas verificaciones de los datos de los clientes con información cruzada, y, en la inexistencia de documentación que demuestre que se haya realizado un proceso de análisis del cliente y de su capacidad de pago, previo a la concesión del crédito, lo cual constituye un evento de potencial riesgo para el Banco”.
El Banco Sudamericano por su parte, a través de un boletín de prensa, calificó ayer de “injusta, arbitraria e ilegal” la ocupación de la entidad efectuada ayer por parte de la SBS.
“El Banco Sudamericano se encuentra totalmente líquido, sólido, solvente y cuenta con los fondos suficientes, por lo que pide a sus cuentacorrentistas, cuentaahorristas y depositantes, retirar los valores confiados a nuestra entidad”.
Agregó que devolverán “hasta el último centavo a quienes confiaron en el Banco, para lo cual solicitamos a la SBS la inmediata autorización”.
En un remitido de prensa, los empleados rechazaron una supuesta solicitud de incremento de capital efectuada por parte de la SBS el 18 de agosto pasado al banco, por “déficit patrimonial”, que – dicen- es “inexistente”.
Pidieron una cita con el mandatario Rafael Correa para explicar “la positiva situación” de la entidad.
La Corporación del Seguro de Depósitos (Cosede) informó , por su parte, que en 10 días laborables iniciará el proceso de devolución de depósitos. Se cubrirán recursos de hasta USD 32 000 por cliente.
El cronograma se publicará en los próximos días en El Telégrafo, El Universo y EL COMERCIO.
Rosa Orellana, comerciante guayaquileña, espera que le devuelvan los USD 5 000 que tenía depositados en un cuenta corriente, desde el 2013.
Ayer, cuando llegó a la única agencia del Banco Sudamericano en Guayaquil ,se encontró con las puertas cerradas.
Orellana indicó que depositó USD 2 000 el pasado viernes. “Nunca me dijeron nada, todo parecía normal”, expresó.
Ningún funcionario de la Superintendencia de Bancos se pronunció sobre el tema, hasta el cierre de la edición.